domingo, 29 de diciembre de 2013

Señora que quiere recoger frutos





Dicen que el otro día Rajoy se apareció a unos pastorcillos, digo periodistillos, sin plasma ni nada, in person, a pelo. Y dicen que lo hizo para anunciar que el año que entra terminará la etapa gris. Que toca recoger los frutos.
 "No vamos a desfallecer ahora que recogemos los frutos de tanto esfuerzo".
No sabemos si sólo haremos de recolectores para apilarlos en la despensa del patrón o nos caerá algún cestillo de manzanas. Viniendo de donde viene el anuncio me temo que las manzanas sean como la de Blancanieves. 














Ya se ve la luz al final del túnel. Ay, esa es otra. ¿Cómo se cuece lo de la subida de la luz?
 Dejemos que nos lo cuenten...
"Vamos a subir la luz. Atención, pregunta: ¿Cómo se la metemos al personal? Fácil.
Primero se deja caer el subidón subidón... que alguien lo filtre, pero como que no es cosa nuestra. Si se le puede echar la culpa a la herencia recibida, mejor que mejor.
Luego nos ponemos la capa de Supermán y salimos diciendo que vamos a luchar por el sufrido contribuyente, hombre pofavó....a mi contribuyente que no me lo toquen.
Y después, nos vamos de relaxing cups, descojonados de la risa que da el saber cómo esos desgraciaítos andan dándole a la calculadora para saber si van a poder poner la calefacción o tendrán que poner a la abuela a tejer mantas in extremis.
Damos un tiempo prudencial para que el pueblo llano se crea que la lucha por sus derechos está siendo más que cruenta, y mientras, cae otra tanda de gintonics de los de a 3 euros del Congreso. ¡Qué sitio para currar el Congreso! Mejor que en casa. Se curra poco, que no te apetece oir lo que están diciendo, pues te escapas al bar, y encima te dan 1823,86 euros de alojamiento todos los meses. Da igual si vives a la vuelta de la esquina. Un chollo, vamos. Dicen que sólo lo supera el Senado, que es como la tierra prometida. Ahí estamos todos echando la solicitud.
Bueno, ¿por dónde iba?...
Finalmente se convoca a los medios y sale el jefe como héroe victorioso a modo de Aragon en la última escena de "El retorno del rey" y anuncia la buena nueva.
Habrá subida, sí, pero ni comparación con la que se nos venía encima. Será como un chisporroteo, un pequeño calambrazo.
Sauron ha sido derrotado. Empiezan los brotes verdes."
                   Ah no, que eso era de otra película...



viernes, 27 de diciembre de 2013

Señora que cocina por Nochebuena





 Despierto en un hotel sevillano. Es 25 de diciembre, fun fun fun... 
La noche llamada Nochebuena ha sido de todo menos buena. Ciclogenética, nuevo palabro para definir el temporal de lluvia y viento, aderezado con árboles tumbados, alguna que otra tapia venida abajo y mucha, mucha agua.
A pesar de las inclemencias meteorológicas lo pasamos bien. Cobijados en el salón de la residencia sevillana de mi primogénita y rodeados de gatos, dimos buena cuenta de una buena cena napolitana. Porque mi familia tiene un ramalazo italiano fijo.
En casa, la pasta forma parte del menú de forma habitual. Día sí, día también.
Y en Nochebuena tampoco puede faltar.


Antes, en llegando estas fiestas yo preguntaba:
- "¿Qué os apetece este año?¿ Asamos un pavo?", decía yo con el hacha de talar pinos en la mano.
- "No fastidies, que se hace bola. Además los pavos son lindos. Anda, guarda el hacha..." decía Francesca
- "¿Cordero a la segoviana'?, proponía yo, sacando de la alacena los platos decapitadores.
-"¡Ay no! Con lo lanudos y esponjosos que son los corderitos. Mamá, ¿es que todo lo que propongas comer va a tener cara lastimera?"
Descarté la pularda, el estofado de vaca retinta y el cabrito cuchifrito. Di por hecho que el conejo con arroz tampoco iba a ser muy aplaudido en cuanto les recordara al de Alicia en su país.
- "¿Qué tal una buena lombarda?"
- "A mi me da gases", replicó el mediano
Nada de conciertos de tuba. Fuera coles de bruselas, romanescus y demás verduras flatulentas.
Pues se me acaba la lista...
"¿ Y por qué no haces macarrones?", dijo el pequeño al verme con cara circunspecta.
Y ahí están, siempre presentes. Como plato principal de noches buenas, o malas.
 Sí aceptaron algún bichejo marino tipo gamba o almeja, alguna tartaleta o croqueteo alrededor, pero la fuente de pasta tiene que presidir nuestra mesa como una reinona.
Pues hágase su voluntad. Me lo ponen fácil... y siempre triunfo...




lunes, 23 de diciembre de 2013

Señora que felicita las Pascuas



Llegó el solemne día en que hay que felicitar las Pascuas.
De niña iba con mi grupito de amigas, de casa en casa a cantar "el pujo". El pujo se cantaba por tierras castellanas, aunque luego fue relegado a secundario y fluyó el villancico, que tenía más variedad.
Pero el pujo tenía su aquel.
Aquella famosa letra que decía: "Pujo pujo pujo señora María, deme usté aguinaldo que es usté mi tía. La zambomba pide pujo y el que la toca ocurrencias. Si no nos dan aguinaldo le cagamos a la puerta."
Gran letra con gran mensaje, un tanto amenazante pero muy humano y sentimental. Está claro que la señora María abonaba el aguinaldo con presteza, aunque fuera porque una evacuación múltiple al lado del zaguán no iba a dar la talla como ornamento navideño. Y nosotras seguíamos calle abajo, aporreando puertas para ofrecer nuestro alegre cantar, pequeñas mafiosillas en busca de dádivas. 
Luego llegó telefónica con sus mensajes de móvil y se llevó nuestro aguinaldo. Bueno, nosotras también crecimos, claro está. La señora María pasó a mejor vida y el pujo se quedó en un rincón de la memoria.
Ahora el wasap, twitter, facebook y demás familias se han hecho con el control de la felicitación navideña. Felicitaciones de diseño, con las últimas tecnologías, que lo mismo le ponen un gorrito de Papa Noel a la abuela que le adjuntan tu cabeza a un gnomo danzarín.
Una servidora, antigua donde las haya, vuelve al chrisma de toda la vida para desearos mucha felicidad.
Y quiero hacer un guiño a los amigos, a los que siempre están ahí aunque no se noten, a los que no conoces en persona y te echan un cable de ánimo desde dentro del ordenador, a los que le pides algo y no preguntan por ni para qué, a los que cuando te duele el hombro se ponen a hacer tu trabajo, a los que te echan de menos al segundo día que no te ven....  
Lo digo con conocimiento de causa, la vida no sería lo mismo sin vosotros.
Gracias por estar ahí y disfrutar mucho de estas fiestas.  

domingo, 22 de diciembre de 2013

Señora que añora aquellas comidas de empresa


¿Qué fue de aquellas comidas de empresa por Navidad? Aquellas en las que dejábamos a un lado escaletas, horarios, estreses y malos rollos y nos reuníamos en torno a una mesa a comer esos menús de plato enorme y comida escasa y sobre todo beber, como los peces en el río, pero con más gradación.


Y esas coreografías, servilleta en mano, pidiendo el indulto de alguien, y luego venían las guerras de pan, cestillo en ristre. 
Y las cenas de hermanamiento o de intercentros con las ciudades aledañas, donde poníamos cara a las voces que oíamos por teléfono cada día.



Todo era alegría y alboroto. Los comentarios laborales eran sobre los patazos metidos en informativos, ya fuera en forma de atún en alerta o de fajín del abuelo.



En las caras se notaba el alegrón que transmite la extra calentita en la cuenta corriente. Bueno, dice esta muchacha que el tinto también tiene algo que ver...


Las mesoneras se ponían así de alborozadas cuando asomábamos por la puerta de la cantina. Nunca supe porqué.
Y llegaban las danzas...



y las imitaciones de Chiquito o de Sabrina....


un poco de boxeo....
cánticos regionales....


algún sentimental se atrevía con un fado...

la exaltación de la amistad....

y alcohol para curar las heridas.



Eran comidas multitudinarias y alegres. Pero... la comida empresarial se está perdiendo y es una pena. 
Propongo un brindis por ella, para rescatarla del pasado,
 y por los comensales, por los que se fueron a otras tierras,
 por los que lo hicieron para no volver, sobre todo por ellos,
 y por los que seguimos aquí, siempre con ganas de levantar un vaso en buena compañía.








viernes, 20 de diciembre de 2013

Señora en la penumbra





Que dicen en el parte que nos suben la luz un mucho por ciento. Estos del PP son insaciables. Me los imagino diciendo unos a otros
"Sal tú Montoro, que a mi me da la risa"
"No, no, sal tú, que las pensiones me tocan a mi fijo."
A veces pienso que esto es una especie de concurso de aguante. ¿Cuánto puede soportar el ciudadano de a pie? ¿Hasta dónde llega la capacidad de adaptarse a la miseria?....
Y un día cualquiera sale la Cospe y dice:
"Que era bromaaaa!!!!! Inocentes, que sois unos inocentes..."
Y alguien se levanta y le da un tartazo y ella se descojona en vez de ordenar prisión incondicional para el tartero.
Mientras llega esto, o no, bajaré del desván los candelabros de la abuela para la mesa del salón. En breve mi casa se asemejará a la de Eddard Stark, señor de Invernalia, y abriré la puerta de mi morada, antorcha en mano al grito de "¿Quién vaaaa?" 
Si al final va a resultar que este gobierno es una máquina del tiempo. Empezamos el viaje por la dictadura franquista y acabaremos en Atapuerca. Viaje con nosotros a mil y un lugar. Sin aviones, como en Castellón.
La nota positiva es que el subidón empieza en Navidad y tenemos puestas las lucecitas del árbol.... aprovecharlas antes de que entremos en el año de las sombras.



jueves, 19 de diciembre de 2013

Señora que prepara su Navidad



Ya es día 19 y hay que sacar las reliquias navideñas. Vamos planchando el reno y almidonando las bolas de los gorros. Por lo menos hay que orear la chaqueta de Mamá Noela que apesta a cerrao.
Ya tengo mi décimo de 20 leuros que compartiré con el amigo Montoro si se tercia, aunque el hombre todavía no se haya estirao por aquello de que no llevaba suelto cuando le pedí su parte. Anda liao recogiendo cestas de navidad y yendo de mala gana a las cenas de empresa y demás obligaciones que tiene por esta época, así que me ha dicho que coja yo el décimo. Angelico.... a ver si le dan bien de comer, que está muy flaco.
Tengo que ir pensando en las viandas, en los regalos..... uf, yo llego tarde como siempre.
Tampoco es que me motive mucho eso de regalar por obligación y si encima abro el monedero y sale corriendo la araña, adiós.... 
Este año he hecho la pregunta: 
-"A ver, ¿qué os hace falta? ¿calcetines?¿bufandas?¿guantes?"
Porque los aifon, aipad, aipod y demás "ayes" son artículos fríos, tecnológicos, sin alma y están sobrevalorados. Sobre todo esto último....
Que no, hombre, que no...
Nada tan hogareño como unos calcetines gordos. 




domingo, 15 de diciembre de 2013

Señora que va a almuerzo campero


Aprovechando que llega a la cuarentena, mi amiga Concordia decidió celebrarlo invitando a sus allegados a un almuerzo campero. Campero viene de campo, así que nada de lentejuela, rasos ni taconazos. Atuendo cómodo, en mi caso, vaquero y camiseta holgada. Alguna, hace trampilla y lleva tacones, por eso parecen más altas que yo, pero qué más quisieran ellas.....



El comité organizador del evento nos ofrece un mapa y unas coordenadas de google en las que no sale el lugar del ágape. Llamo al criptólogo pero no me coge. Al final optamos por coche escoba y caravana que es lo idóneo en estos casos.






Camino caprino y por fin, llegada a la finca. Buen sitio, buenas viandas y solecito que invita a salir al patio, cerveza en mano.













Obsérvese en la imagen de la izquierda cómo esta muchacha aprovecha el momento foto para sustraer la cartera de la confiada joven de rojo. 



Momentos taurinos tras la comida. Hoy es la tarde de "El niño de Algar" afamado maestro de la zona. El chaval de la camisa de cuadros sólo posa para la composición de la foto, mientras Concordia ensaya un número de escapismo.




Los triunfadores de la tarde saludan al respetable.

Llega el momento dulce, la supertarta, los cánticos, las copas y el cachondeo. 


Un gran día.... 



viernes, 13 de diciembre de 2013

Señora que pone el árbol


Voy un poco atrasada en esto del ornamento navideño. Yo que era de las que, en llegando estas fechas me ponía el abrigón y el gorro de bola, cogía el hacha y salía bajo la ventisca en busca de un buen abeto. Pero el sol gaditano no motiva a desenterrar el hacha.
Mi hermana burgalesa manda por el "guasa" foto de su arbolico.

Muy mono, en verde clásico, con estrellitas y lacitos color caldo de ave y blandiglub.
A juego con los sofales y la batamanta. 
El pie de árbol no atisbo a ver de qué se trata, aunque se asemeja a una bolsa de basura deconstruida. 














En la foto de la derecha, vemos el árbol de mi hijita. No nos lo ha puesto fácil la muchacha. Voy a por las gafas de cerca....
Bueno, pues está claro que es un árbol de raza albina, muy nórdico, también en consonancia con puertas y paredes.
Predominan los tonos fríos, azulados y liláceos. 
En este, la estrella se alza con más poderío y todo el árbol en sí, es más grande. 
El pié de árbol son los paquetitos de regalos, probablemente más vacíos que mi cartera. Muy papanoelesco.






Ambas dos me instan a que saque del altillo a mi pequeñajo, al que familiarmente llamamos "el cono" o Arbeloa. Antes de él tuvimos uno que compré en el Prycafur, de estos plegables. Cuando los niños eran niños, en el puente de la Constitución dedicábamos un día a expandir sus ramas y colgar parsimoniosamente las cintas, angelicos, lazotes, bolas y demás floripondios. Luego, esas bolas servían de juguete a la gata durante todas las fiestas. 
Ahora que no hay niños ni tiempo, hacía falta un árbol cómodo, fiable y rápido. Y así conocí el práctico árbol-cono. Se coloca en cualquier parte, sencillo de manejo. 
La misma estrella que lo corona sirve de asa. Se pone en un pispas y se quita en otro. Apenas ocupa. Es ideal. Un poco famélico pero en estos tiempos de austeridad queda estupendo. La estrella-asa está un poco inclinada para transmitir la inquietud que tenemos en nuestro interior, desde que el año pasado no cobramos la extra. No hay pie de árbol, ¿para qué si es un árbol errante? Pero es dorado cual burbuja de Freixenet y reina desde ya en el pico de la mesita de poner los pies. 
Ea, helo ahí....